Receta de Sopa de ajo
La sopa de ajo es un plato que sabe a hogar, a reuniones familiares, a chimenea; de ésos que traen recuerdos y que además se hace en minutos y fácilmente.
La sopa de ajo es un plato que sabe a hogar, a reuniones familiares, a chimenea; de ésos que traen recuerdos y que además se hace en minutos y fácilmente.
Esta sopa os calentará el cuerpo y el alma, por el toque picante que tiene y por la potencia de sus sabores. Además, es muy fácil de preparar.
Hace ya unas semanas que el frío y el agua azotan algunas zonas del país y el cuerpo nos va pidiendo platos como éste para entrar en calor. Además, en cuanto llega el otoño siempre me viene a la cabeza la imagen de una calabaza. No, ¡de muchas calabazas! :)
Por fin me he quitado una espina que tenía clavada con esta legumbre. Nunca han sido santo de mi devoción por culpa de cómo se hacían en casa cuando era pequeño, y no porque mi madre cocinase mal, al contrario, sino porque las hacía tan 'sin' que no había quien se las comiese: sin sal, sin chorizo, sin... ¡Sin todo lo bueno! :)
Esta es mi adaptación de una receta que leí en un blog que sigo habitualmente y que a priori tenía buena pinta. Después de hacerla me encuentro con que la proporción de coliflor/caldo era muy pequeña y además resultaba pesadísima. Quita de aquí, pon allá y al final salió esto, una sopa mucho más sabrosa y algo más ligera.
Llega la época en la que a todos nos apetecen platos más frescos de los que acostumbramos a comer en invierno. Comemos más ensaladas y empezamos a hacer gazpacho, salmorejo, ajoblanco y un largo etcétera.
Es en ésta época cuando en nuestra casa nunca falta una buena olla llena de gazpacho en la nevera, nos gusta tanto que hasta tenemos un par de litros en brick para una emergencia :) Ya, no es ni parecido, pero ayuda a calmar el mono en las calurosas noches de verano.